En el salón de actos de la Escuela de Hostelería de Jerez, tuvo lugar en la tarde-noche de ayer la presentación de El ojo y el tiempo, último libro, por el momento, de Dolors Alberola.
Intervino en primer lugar el poeta Mauricio Gil Cano, quien, tras presentar a los miembros de la mesa, dio la palabra a Domingo F. Faílde, encargado de explicar a los asistentes las claves poéticas del libro.
Faílde –cuyo texto íntegro se publica en la columna de la derecha- se refirió al símbolo del ojo y sus connotaciones filosóficas, punto de partida, según él, de este libro, al que definió como un canto de amor a la creación artística.
A continuación, sonó la música que dos músicos eminentes, Ángel Hortas y Pablo Paniagua, aportaron a un acto que, en todo momento, estuvo presidido por la más exquisita belleza. A partir de este instante, las selectas partituras interpretadas por ambos se trenzaron con los poemas de Dolors Alberola, creando una atmósfera estética que subyugó al auditorio.
Por último, tras la firma de ejemplares por la autora, se sirvió un vino de honor.
El poeta Mauricio Gil Cano, director de EH y anfitrión del evento, durante sus palabras de presentación.
Dolors Alberola, radiante, mientras Domingo F. Faílde explica a los asistentes los supuestos teóricos de El ojo y el tiempo.
Domingo F. Faílde en un momento de su intervención, ante la atenta mirada de Mauricio Gil Cano y Dolors Alberola.
Domingo F. Faílde: "El ojo y el tiempo" es un hermoso canto a la creación, a través de la cual el amor del creador, del artista, genera nuevos mundos. Alguien dijo una vez que el poema, ante todo, es un mundo y que todo poeta que se precie erige un mundo propio, en el que puede reconocerse.
Dolors Alberola comienza su intervención.
Ángel Horta, al piano, y Pablo Paniagua, al violín. Ambos maestros derramaron su música en un acto que, en todo momento, estuvo pleno de emoción estética.
Numerosos amigos arroparon con su presencia a Dolors Alberola. En esta imagen, de izquierda a derecha, vemos a Isabel de Rueda, Idoye, M. Carmen López Frías, Manuel Saborido y Maribel Tejero.
Para el acto de presentación, Dolors Alberola seleccionó diez poemas de El ojo y el tiempo, que leyó en cinco bloques de a dos, con otros tantos intermedios musicales.
Pablo Paniagua, un virtuoso del violín. Todo un descubrimiento.
Dolors Alberola en otro momento de su intervención.
Ángel Horta en una de sus actuaciones.
El numeroso público asistente siguió versos y música en medio de un silencio sobrecogedor.
Los poemas de El ojo y el tiempo sonaron en la voz de su autora, a quien numerosos asistentes felicitaron por la hermosa y emotiva lectura que la poeta les ofreció.
La firma de ejemplares, un rito literario al que Dolors Alberola se sometió complacida, una vez terminada la presentación de su libro.

Dolors Alberola firmó muchos ejemplares de El ojo y el tiempo.